viernes, 16 de noviembre de 2012

La ciberpiratería, otra forma más de delinquir


A pesar de no contar con la misma importancia, cada día los delitos informáticos se transforman en el común denominador de los venezolanos



Odalys Rodríguez/ ody418@gmail.com

En algún momento, la mayoría de los venezolanos se han visto atacados por un ciberpirata, una persona que desde cualquier parte del país e inclusive del mundo, se vale de sus habilidades informáticas para usurpar o violar, desde  cuentas o perfiles en redes sociales o correos electrónicos, hasta cuentas y claves de bancarias. En un país donde alrededor del 40% de la población ingresa a internet, de acuerdo a datos ofrecidos por Tendencias Digitales, los delitos informáticos se hacen más comunes y las técnicas de protección contra ello aumentan.
Los delitos informáticos, los crímenes electrónicos o también llamados los ilícitos digitales, son los términos que se utilizan para identificar aquellas operaciones ilegales que se realizan por medio de Internet, y que tiene como fin dañar ordenadores, redes de internet y medios electrónicos, a través de virus o sistemas operativos contaminados. Además, existen otras categorías o niveles aún más complejos, que incluyen fraudes, robos, falsificaciones, malversación de fondos y usurpación de identidades en cuentas o redes sociales.
William Cova, especialista en delitos informáticos o informática forense de la empresa Inversiones Tecnoiuris, comenta que en Venezuela actualmente, los delitos más comunes “son el robo de información a través de correo, la eliminación de información en algunas compañías por la competencia, debido a algún empleado mal pagado que busque venganza. Además, de los pishing, que es el atentado a entidades bancarias y grandes empresas. Y el más común de todos, que es engañar al usuario a través del maquillaje de la página para que parezca real.”

 


En este sentido, el maquillaje de páginas, en especial las de entidades bancarias, aumenta su incidencia, siendo el delito más visto en el país y el que afecta a la mayor parte de los venezolanos. "El delito más común en el país es la clonación de tarjetas de crédito y debito, el cual se ha reducido de una manera drástica luego de la implementación del chip. Con el cambio de la tecnología del chip ya no es posible realizar como antes la clonación”, explica Raymond Orta, abogado y perito en Informática Forense. Sin embargo, debido a estas previsiones que toman los usuarios, se han creado otras formas de delito como es la obtención de datos para acceder a sus cuentas y realizar transferencias, y agrega, hay una modalidad en ascenso dentro de las empresas, donde a través de diversas técnicas se obtiene la información necesaria para realizar transacciones electrónicas.


En la persecución de los hackers
Una tendencia observable en este tipo de delitos informáticos, es el anonimato por parte de las víctimas. Las personas no denuncian este tipo de actos por muchas razones, y una de ellas es que consideran que los organismos de seguridad no se van a encargar de las averiguaciones pertinentes y mucho menos, sus pertenencias digitales serán devueltas, y esto es gracias a la desinformación, puesto que sí existen entes o cuerpos de seguridad que se encargan de seguir a los hackers. En este sentido Orta es enfático y aclara, que sí hay en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), un grupo de investigadores que se dedican a recoger y evaluar la evidencia para procesar jurídicamente estos actos. 

"A raíz de la aparición en Gaceta Oficial en el año 2001 de la Ley de Delitos Informáticos el Cicpc creó una división especial que se encarga de la sustanciación, investigación y auxilio del Ministerio Público en la investigación de este tipo de delitos y en el sector privado existen laboratorios de informática forense que se especializan en colectar y evaluar la evidencia con fines judiciales", indica el profesional.
De igual manera, Cova agrega que las empresas que se dedican a este tipo de trabajo son en su mayoría bufetes de abogados que posean la extensión en delitos informáticos, puesto que los casos siempre van ligados a un oficio o a una denuncia.
De acuerdo a la Ley Especial contra los Delitos Informáticos, las personas que accedan o utilicen sistemas con tecnologías de información para obtener datos de una cuenta personal, y no cuenten con la autorización del titular, serán penadas con prisión de uno a cinco años. Ante ello, Cova recomienda la denuncia de estos casos, puesto que eso asegura la permanencia del ente de seguridad y evita el aumento del crimen. 
La página en Internet criminalística.net del anteriormente mencionado Raymond Orta, es un portal en donde las víctimas pueden aclarar todas sus dudas acerca de qué hacer si se sufre un atentado de este tipo, así como los profesionales que se deben contactar para solventar los casos correspondientes.

 Diez pasos para evitar el crimen digital

En una entrevista otorgada por Raymond Orta al espacio televisivo Alta Densidad, recomendó diez pasos útiles para evitar el conocido hackeo a páginas, cuentas de correo electrónico y redes sociales.
Utilizar claves que superen los ochos dígitos y con combinaciones entre letras y números, además de la utilización de símbolos poco comunes, ponen la tarea del hacker cuesta arriba. Conjuntamente, el mantenimiento de la información en lugares seguros y privados, así como renovar constantemente la contraseña, y que esta no sea la misma para todas las páginas y perfiles personales; son algunos de los pasos más relevantes para prevenir los delitos informáticos. 


Perfil del hacker
La mayoría de las víctimas se preguntan, “¿Qué motiva a estos delincuentes a incurrir en estos actos?”, “¿Por qué hacen estos delitos, que muchas veces no les generan mayores beneficios?”
No hay respuestas concretas acerca de este fenómeno, sin embargo, gracias a estudios en el tema, los especialistas han logrado indagar en la personalidad de estos individuos, todo esto para darle un mayor grado de contextualización al problema e identificar de una forma más fácil a los posibles culpables.
Por un lado son caracterizados como personas con un bajo nivel de autoestima, que buscan el reconocimiento de todos por sus conocimientos, y que además pretenden ser incluidos en un grupo que les otorgue popularidad y el entorno de compañerismo. Orta explica que, “al inicio la motivación de los hackers era la de tener el reconocimiento de la comunidad como una persona que conoce de tecnología y por ser capaz de violar un sistema de comunicación, pero ahora hay nuevas modalidades como los ataques de agrupaciones de delincuentes informáticos. Aquí en el país existen el N33 que es un grupo que hace el «hacktivismo», que es una denominación que se le ha dado al cometer delitos informáticos por motivaciones políticas".
Otros, por el contrario siguen la voluntad de divertirse, que generalmente significa en dar paseos por el sistema haciendo alarde de la intromisión. Proceso que se ha llamado joy rinding, o paseos de diversión.
En un foro sobre seguridad celebrado en España por Luciano Sanellas, este argumenta que, "la sociedad debe tomar conciencia de que el hacker es una persona que comete un acto ilegal con pleno conocimiento de causa sólo por el mero hecho de introducirse, sin autorización, en un sistema informático ajeno, exista o no, intención de causar un daño o ánimo de lucro". Por lo que la subestimación de estos individuos no es lo más apropiado, y mucho menos dicho de alguna forma, bajar la guardia cuando se ingresa a Internet, en especial cuando se trata del acceso a cuentas bancarias, correos electrónicos y redes sociales.
 




 

1 comentario:

  1. contar con un perito informatico te ayuda mucho a asegurar una sentencia favorable recordemos que hoy en dia podemos estar seguros que con la era de informatica la mayoria de las pruebas son asi de esta area

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